La Puerta de la Feria o Puerta del Reloj de la Catedral de Toledo es gótica u ojival. Cuenta con gran cantidad de imágenes de santos, niños, ángeles que decoran los arcos y el tímpano. Como puede verse, la escultura es un poco rudimentaria. Es la primera vez, después de muchos siglos que se juntaron la arquitectura y la escultura con gran asombro de los mudéjares que no solían emplear los seres animados en sus trabajos artísticos, siguiendo las reglas del estilo árabe, que lo tenía prohibido el Corán.
Por la parte inferior son muy dignas de admiración las hojas de la puerta, con labores muy finas, trabajadas sobre hierro chapado en bornce (siglo XVIII).
Son muy notables también los grupos escultóricos que representan a la Anunciación y a la Aparición de Santa Leocadia a San Idelfonso en la Basílica de Santa Leocadia, hecho que se supone ocurrido dos siglos antes de construirse el Puente de Alcántara.
Entre los lienzos que en la parte superior se ven a uno y otro lado, el más notable es el que representa la presentación, al Rey Fernando III El Santo, de los planos de esta Catedral por el Arzobispo Jimenez de Rada.
Puerta del Reloj
Tras la magnífica reja de Villalpando, el famoso coro.
El famoso...