A partir de 2010, los tres países principales productores de cemento en el mundo son los Estados Unidos, China y la India. Entre estos países, sólo China fabrica alrededor del 45% de la producción total mundial de cemento. Es un producto no reciclable, por lo que cada nueva construcción o reparación necesita cemento nuevo, por lo que el consumo mundial sigue aumentando. Especialmente en las economías de Asia y Europa del Este, la producción de cemento es un elemento importante del progreso.
Según el directorio mundial de cemento, existen aproximadamente 5673 plantas de producción de cemento activas en el mundo; de éstas, 3900 están en China.
Algunos de los principales fabricantes de cemento son LafargeHolcim, Anhui Conch, China National Building Materials, HeidelbergCement, Cemex, Italcementi, China Resources Cement, Taiwan Cement, Eurocement, Votorantim, etc.
El consumo mundial total de cemento, según lo indican las estadísticas en 2015, mide hasta 18 millones de toneladas métricas, la mayoría de las cuales se atribuye a la creciente economía nacional de América del Norte.
Los principales productores de cemento entre los países capitalistas desarrollados son Estados Unidos, Francia, Italia y Alemania. Irán, ahora el principal productor en Medio Oriente, ocupa la tercera posición en el mundo para la fabricación de cemento. Los países asiáticos y africanos también son progresivos en la producción de cemento.
El proceso del horno en la planta de cemento causa la emisión de dióxido de carbono, que es uno de los principales gases de efecto invernadero responsables del calentamiento global. Con el objetivo de reducir, incluso eliminar, los dañinos impactos ambientales del uso del cemento, las principales industrias están tratando de implementar tecnologías que utilicen materiales reciclados y fuentes de energía renovables. El “cemento verde” es un material de construcción sostenible que es el resultado de una extensa investigación relacionada con la minimización de los efectos del calentamiento global.