Podríamos encontrar el verdadero valor y la calidad de una creación determinada al observar con qué frecuencia se reproduce y/o imita esa creación en particular a lo largo del tiempo. La Mezquita de Córdoba es uno de los grandes patrimonios arquitectónicos de España. Y esto ciertamente no es por mera casualidad o accidente, sino por los avances arquitectónicos implementados en su construcción por los musulmanes. Esto convirtió a la Mezquita en mucho más que un lugar de oración: una fuente monumental de inspiración técnica.
Es el caso de la bóveda de crucería: donde se construye una bóveda que intersecta cuatro bóvedas de cañón que dan como resultado ocho bordes en forma de estrella. El número de aristas siempre es múltiplo de cuatro. Debido a que las diferentes bóvedas de cañón no se unen en el centro de la bóveda, hay espacio libre que permite construir una bóveda más pequeña.
Esta innovación técnica fue replicada en todo el Mediterráneo. Pero veamos algunos ejemplos.
La primera bóveda de crucería
La primera bóveda de crucería fue construida por Abd al-Rahman II alrededor de 960; ahora es parte de la capilla de Villaviciosa. Es fácil notar cómo la bóveda principal está hecha de varias bóvedas más pequeñas.
Poco después, alrededor del año 980, Al Hakam II comenzó a construir el Mihrab y su famosa bóveda de tesseras doradas. A cada lado del Mihrab se construyeron dos bóvedas de nervaduras asombrosas.
Luego, la Capilla Real, construida bajo el dominio cristiano después de la conquista de la ciudad dentro de la misma Mezquita. Su construcción data del siglo XIV. La bóveda fue realizada en madera con técnicas de arte mudéjar, como las muqarnas que la decoran.
Quizás nunca sepamos con certeza cuántas bóvedas se perdieron en las guerras, pero sí sabemos que esta solución práctica y estética de la bóveda de crucería influyó rápidamente en todo el mundo islámico. Alrededor del año 999 se construyó la Mezquita de Toledo, hoy conocida como la Capilla del Cristo de la Luz, una construcción sorprendente con nueve bóvedas de crucería. La fórmula de Córdoba continuó su expansión influyendo en el Palacio de la Aljafería de Zaragoza, el minarete de la Mezquita Kutubiyya en Marrakech, el Alcázar de Sevilla o la Gran Mezquita de Tlemcen entre otros.
Iglesias románicas con bóvedas de crucería
Esta peregrinación finalmente cruzaría los Pirineos y llevaría esta técnica al resto de Europa.
La iglesia de San Miguel de Almazán en Soria es una iglesia de orígenes románicos que también tiene varias otras técnicas y modas arquitectónicas. Su construcción comenzó alrededor del siglo XII y en su interior podemos apreciar fácilmente una bóveda de técnica islámica.
El edificio románico navarro, como el Santo Sepulcro de Torres del Río, Santa María de Eunate y el Espíritu Santo de Roncevaux, constituyen un conjunto de edificios de especial interés. También se puede encontrar una capilla mozárabe dentro de los claustros de la Catedral Vieja de Salamanca; Al igual que muchos otros ejemplos.
En Francia, la Iglesia de Sainte-Croix es un edificio que data del siglo XII, ubicado en la ciudad de Oloron-Sainte-Marie, en la provincia francesa de Pyrénées-Atlantiques, una vez más encontramos una bóveda de crucería de inspiración islámica. O la iglesia de L’Hôpital-Saint-Blaise también data del siglo XII.
La bóveda de crucería en el arte mudéjar
Hay muchas otras construcciones impresionantes en Aragón, pues el arte mudéjar se incrustó profundamente aquí, dejándonos hermosos ejemplos como la torre de la linterna de la Seo de Zaragoza (Catedral del Salvador).
O la torre de la linterna de la Catedral de Teruel, o la Catedral de Tarazona, ambas construidas siguiendo la técnica y la moda de la Catedral del Salvador de Zaragoza.
La bóveda de crucería en el Renacimiento
El arquitecto y matemático italiano Guarino Guarini diseñó para la iglesia de San Lorenzo de Turín una bóveda de crucería muy similar a la que encontramos en el Mirhab de Córdoba. Pero luego iría más allá en su proyecto para construir la bóveda de la Capilla della Sacra Sindone, que forma parte del ábside de la Catedral de Turín y una de las bóvedas más interesantes del mundo.
La bóveda de crucería en el Siglo XX
El Templo votivo del Mar de Nigrán fue diseñado por el arquitecto Antonio Palacios, quien había diseñado previamente el Palacio de Comunicaciones y el Círculo de Bellas Artes en Madrid. El templo fue construido entre 1932 y 1937. Es el primer vitral que utiliza la técnica Dalle de verre en España, que es un vitral colocado sobre una matriz de hormigón.
La Universidad de Gijón fue construida entre 1946 y 1956 y fue diseñada por el arquitecto Luis Moya, es el edificio más grande jamás construido en España: 270.000 m². Dentro del interior de la iglesia hay una cúpula que pesa aproximadamente dos mil trescientas toneladas, y veinte pares de bóvedas de crucería sostienen toda la estructura sin usar una sola columna.
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