Dos de los problemas más importantes que enfrentan las grandes ciudades son la vivienda y el transporte. La escasez de viviendas adecuadas, especialmente para las familias de bajos ingresos y para los ancianos, ha llevado a la sobrepoblación de los barrios marginales, y ha ayudado a crear los problemas adicionales de la delincuencia como la delincuencia juvenil y en algunos países, además las tensiones raciales.
En los países en desarrollo, la falta de infraestructura, de puentes, avenidas, calles, autopistas hacen que la concentración del transporte genere dificultades de movilidad y servicios caros.
El enorme aumento en el número de automóviles ha obstruido las calles y plazas de aparcamiento sobrecargados, mientras que los sistemas de tránsito no se han desarrollado tan rápidamente como la demanda de los mismos. Además, las ciudades tienden a crear la contaminación del aire y la contaminación acústica y algunas también contaminan las aguas cercanas.
Un gran número de ciudades también sufren de problemas financieros, impuestos, aunque alto, no son capaces de seguir el ritmo de los costos de funcionamiento de las escuelas y la prestación de servicios públicos. Las condiciones de hacinamiento y los altos impuestos han causado que la gente y la industria se movilicen a los suburbios.
En algunos países las manifestaciones sociales crecientes en grandes cudades como Buenos Aires, Caracas o San Pablo donde diaria o semanalmente hay protestas, huelgas por el descontento social hace que se acrecienten los problemas de las ciudades antes mencionados.