La piedra fue uno de los primeros materiales que contó el hombre, ya que servía de materia prima para la construcción de objetos.
Se estima que fue en el 3000 a.C. que el Imperio Hilita (en la península de Anatonia) construyó los primeros caminos a suelo firme. Otro antecedente destacado son los caminos que realizaron los esclavos egipcios alrededor de las pirámides. Los mesopotámicos crearon una extensa red de caminos, los chinos crearon carreteras hacia el siglo XI antes de Cristo. A partir del año 312 a. C. el imperio romano construyó una red de calzadas con fines militares; los ingenieros militares eran quienes construyeron carreteras y puentes, algunos de ellos una vez utilizados eran destruídos para que los enemigos no pudieran utilizarlos. Tenian un espesor de 120 metros y estaban compuestas por 3 capas de piedras y tierra argamasada.
La parte superior estaba compuesta por piedras gruesas se llamaba Pavimentum
Los romanos hicieron importantes contribuciones al desarrollo del pavimento. Introdujeron la técnica del opus signinum, que consistía en mezclar fragmentos de cerámica o piedra con mortero para crear un pavimento duradero. También desarrollaron sistemas avanzados de calzadas, como la famosa red de carreteras romanas.
Edad media y Renacimiento
Durante la Edad Media, el pavimento en las calles de las ciudades europeas a menudo consistía en adoquines, piedras irregulares o incluso madera en algunos casos. Las calles solían ser estrechas y sin un diseño uniforme.
En el Renacimiento, especialmente durante el Renacimiento italiano, se redescubrieron y aplicaron técnicas romanas en la construcción. Sin embargo, el pavimento seguía siendo en gran medida rudimentario en muchas áreas.
Con el tiempo, las ciudades europeas comenzaron a pavimentar sus calles con adoquines y bloques de piedra, mejorando la infraestructura urbana.
Las órdenes religiosas que florecen en Europa durante la Edad Media fomentan la construcción de caminos para los peregrinajes, en poblados de Francia, Italia y España.
A mediados del siglo XVIII se desarrolla el uso de la cal en países como Inglaterra, a través del trabajo de hombres como el ingeniero John Smeaton. Constructor del Faro de Eddystone, Smeaton fue uno de los responsables del cambio vial en la ciudad británica.
Durante el siglo XIX, Inglaterra fue pionera en implementar leyes de pavimentación, con la creación del Comisionado de Pavimentación, dependiente del Parlamento del Reino Unido. Su tarea se remitía al cuidado y mejora de la red vial.
La Europa del siglo XIX se caracteriza por un desarrollo en la construcción de caminos pavimentados. En pueblos como Tressaget (en Francia) se observaron los primeros caminos realizados a base de piedras de gran tamaño.
Con la llegada de la Era Industrial se explora con mayor cuidado la realización de rutas de pavimento, utilizando piedras más pequeñas (adoquines). La aparición del automóvil fomenta la diagramación de caminos más extensos y aptos para el traslado de vehículos de peso.
El alquitrán se incorpora al pavimentado de calles de Londres y Madrid. Pero los grandes avances en la materia se dan en los Estados Unidos, a través de la fabricación de nuevas capas asfálticas, que permiten una mayor flexibilidad en el desplazamiento de los autos.
El uso de los pavimentos rígidos se dio en Estados Unidos, debido a la necesidad del país del Norte de caminos y rutas transitables para el transporte masivo. El crecimiento demográfico experimentado durante el siglo XIX procuraba nuevas vías de transporte.
Fue el ingeniero escocés John Loundon Mc Adam el inventor del “macadam”, un nuevo tipo de superficie, apto para soportar el peso de los renovados vehículos y transportes de carga. Ingeniero escocés, a principios del siglo XIX Mc Adam publica escritos sobre su descubrimiento.
El macadam consistía en pequeñas gravillas de piedra y capas de rocas, lo que permitía un óptimo drenaje del agua de lluvia. En 1830 se construye en el Estado de Ohio la “National Road”, primera ruta construida bajo este método.
El siglo XX vio un aumento en la adopción del asfalto y el hormigón como materiales dominantes para pavimentos. Se desarrollaron técnicas modernas de pavimentación, y las carreteras de concreto y asfalto se convirtieron en estándares comunes.
A partir de 1905 comienza a utilizarse el concreto como material para la construcción de las carreteras, dando lugar al proyecto de obras públicas más importante de la historia: el sistema inter-estatal de carreteras, con una longitud de casi 28.000 km.
Este sistema de transporte comunica todas las grandes ciudades del país. Fue creado en 1956, gracias a la colaboración del gobierno de Dwight Eisenhower, tras quince años de trabajos de construcción.
El desarrollo del petróleo fomenta la utilización de betunes asfálticos para la fabricación de carreteras viales y pistas de aterrizaje.
A partir del siglo XX, la aviación se desarrolla a gran velocidad, por lo que es necesaria la construcción de pistas que soporten el peso de las aeronaves. El primer aeropuerto se construye en Amsterdam (Holanda) en 1912.
A partir de la década del ’30, el auge de la aviación comercial hace necesaria la construcción de pistas de concreto en los aeropuertos. La llegada de la Segunda Guerra Mundial expandió la cantidad de pistas de aterrizaje en zonas europeas, ante la urgencia de las estrategias militares.
El fin del siglo XX encuentra nuevas técnicas en el desarrollo de nuevas carreteras, que mejoran la adherencia y la capacidad de drenaje ante situaciones climáticas adversas.
La historia del pavimento refleja la evolución de la ingeniería y la tecnología a lo largo de los siglos, desde las calzadas romanas hasta las modernas autopistas y calles urbanas.
Más sobre la historia del pavimento