El estilo vintage o retro remite a espacios ambientados con elementos, colores y formas de décadas pasadas (sin ser remontarnos a la antigüedad). El estilo vintage de decoración de interiores, puede encuadrarse dentro de la estética las décadas de 1920 hasta 1980. Muchos diseñadores de interiores mezclan elementos de distintas décadas para lograr un estilo homogéneo que no es ni contemporáneo, ni clásico, ni moderno sino vintage o añejo.
Dentro del estilo vintage muchas veces también se incluyen elementos del shabby o desgastado. Las arañas y el mobiliario juegan un papel fundamental en este estilo.
Las tendencias actuales de decoración con objetos vintage se pueden hallar cómodamente a través de anuncios publicitarios online. Como vemos en las imágenes, los elementos predominantes del estilo vintage o retro son líneas definidas o rectas y limpias o imitando ciertos estilos de la década del 20 por ejemplo.
No se utilizan colorres brillantes sino apagados o pasteles. Es conveniente que el diseñador analice el estilo que quiera dar porque no es lo mismo un estilo de la década del 20 o del 30 que estilos más Bauhaus de los ’60 o ’70. Entre estilos tan dispares no conviene mezclar elementos. A veces el aspecto rústico de paredes y mobiliario es de utilidad. Para un vintage de los ’60 los elementos que se pueden conseguir en ferias como carteles o imágenes con tipografías típicas son una buena idea.
La combinación de colores y texturas si bien ayuda es secundario en este estilo. El mobiliario lo es todo. Entendiendo el retro que queremos lograr, entendiendo las líneas que se quieren replicar se podrá elegir el mobiliario adecuado.
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