Los planos y diseños de un hospital para niños no son diferentes a aquellos pertenecientes a hospitales para adultos en la necesidad de incorporar elementos que permitan al staff y a los pacientes interactuar con sensibilidad y consideración en un ambiente para el cuidado y la atención.
Todos los hospitales comparten con otros edificios de otro tipo, la necesidad de incorporar los principios del diseño verde para que los costos de la operatividad a futuro y el potencial daño al medio ambiente sean minimizados.
Los hospitales para niños son diferentes a los hospitales para adultos en muchas formas, por ejemplo:
1. Los niños son más pequeños que los adultos y más complejos.
Por lo tanto se debe diseñar un edificio a escala, tanto del edificio en sí como de los elementos. Crear espacios donde se aliente el juego y se normalicen los horarios de comidas.
2. No pueden verbalizar sus problemas.
La tecnología discretamente integrada, descentralización de las estaciones de trabajo de las enfermeras, unidades automatizadas de dispensarios de medicinas. Habitaciones únicas por paciente, zonas para familiares dentro de la habitación, reducir la penetración de sonidos a fin de reducir la distracción.
3. Existen enfermedades típicas de niños que fluctúan por temporada y duración.
Depende las temporadas, los pacientes realizarán diferentes actividades.
4. Los niños necesitan familiares cercanos todo el tiempo con ellos.
El diseño debe satisfacer estas necesidades. Las habitaciones deben ser un lugar de relax, más que de sufrimiento.
5. Los niños son muy impresionables, curiosos y aprenden a través del juego
Los hospitales pueden ser fuente de educación e integración social.
En estos problemas con su consecuentes soluciones, se canalizan a través de un diseño luminoso, que invite a la naturaleza con sus formas y colores, y a la distribución del espacio de la habitación para guardar un lugar confortable para los familiares del menor.
Estar en un hospital para un niño es una experiencia de aprendizaje que puede tener efectos positivos más allá de la sanación así como crecimiento emocional e intelectual. El entorno físico de un hospital le habla a cada persona que trabaja en él o lo visita.
El espacio y otras cuestiones relacionadas con el entorno, influencian los estados emocionales e imparten mensajes subliminales.
Un hospital pediátrico debe esforzarse por producir sentimientos de calidez, aceptación así como confianza y competencia tanto para niños como para padres. Estos mismos mensajes los recibirá el staff que los reforzará en su interacción diaria.
Algunos consejos para el diseño de hospitales para niños:
- Un entorno adecuado para niños se obtiene con algo más que pintar dibujos en la paredes.
- Hay que usar todo la paleta de colores y la imaginación. Los colores brillantes son los más adecuados.
- La familia es un participante activo en el cuidado de un niño. El espacio debe estar disponible en las habitaciones, así como espacios para comer para las familias y para dormir.
- Los paisajes y jardines deben ser accesibles para recorrer y formar parte de la vista desde las ventanas de las habitaciones
- La luz natural debe utilizarse lo más que se pueda.
- Los detalles son importantes. Los niños son curiosos sobre todo lo que ven en su entorno.
- La vida de casa y la escuela debe estar integrada a la vida en el hospital. Debe haber áreas de juego para la interacción, deben incluir elementos culturales que los niños reconozcan y sean interesantes para los padres y el staff.
- Las áreas del hospital deben ser amigables y conciliar aspectos de su apariencia que puedan asustar a los niños.
- El bienestar del staff es muy importante. Vestidores apropiados y lugares de descanso deben ser incluidos.
Fuente: The culture for the future of healthcare architecture. Prof. Romano del Nord. (2009)