El estilo de decoración Art Nouveau se caracterizó desde sus inicios por utilizar motivos y formas derivados de la naturaleza. A fines del siglo XIX, y con el auge de la industrialización, los artistas temían que las formas duras llegaran al arte.
El movimiento The Arts and Crafts o ‘las artes y oficios’ trató de mostrar a través de la decoración y la arquitectura, el valor de las formas naturales y el valor artesanal de los objetos.
Las líneas son curvas imitando a las plantas e incopora formas de animales como mariposas, dragones, aves, plumas de pavo real y plantas como enredaderas.
Los patrones de diseño florales y curvos eran la característica principal del Art Nouveau.
Los colores de la decoración Art Nouveau son sutiles y apagados, incluidos los pasteles, oliva, mostaza, marrón, lila, salvia, blanco, blanco opaco, azul eléctrico y color oro. Las paredes se decoran con papeles florales o patrones de plantas. Los materiales utilizados son los vitrales, la madera y el hierro.
Los vitrales se usan en ventanales, que transforman el interior por los colores y la iluminación que ofrece al ambiente. Los trabajos en hierro tienen formas sinuosas o curvas.
Los arcos y los marcos de las puertas también son curvos y excéntricos. La lámpara multicolor de Tiffany’s es un símbolo de la decoración Art Nouveau.
El Art Nouveau, a diferencia de otros estilos decorativos, está inspirado en la naturaleza y es eco-friendly, ya que permite el uso de madera y papel tapiz pintado orgánicamente.
El Art Nouveau con pocos elementos en un espacio y fondos simples, hace que cada objeto se vuelva significante.