La arquitectura cretense es aquella erigida en la isla de Creta entre los siglos XIX y XIV a. C. Las principales construcciones fueron palacios con salas conectadas por pasajes laberínticos que se situaban alrededor de un patio central. La arquitectura cretense también es llamada arquitectura minoica.
El palacio es el monumento arquitectónico más importante de Creta, siendo el más famoso el Palacio de Knossos, residencia del legendario rey Minos: En torno a un gran patio central, formado por gran número de habitaciones y dependencias, el famoso laberinto de la leyenda de Teseo, y otros patios con columnas. Son construcciones adinteladas, a veces de varios pisos en terrazas, de muros realizados con mampostería y piedra, como refuerzo, que se van a enlucir, permitiendo la realización de pinturas en el interior, Sala hipóstila del Palacio de Knosos.
Muy característica es la columna cretense, estrecha en la base, con capitel de dos cuerpos, equino y ábaco cuadrado, y fuste liso disminuido hacia abajo.